
China en otros puertos

Crisis inmobiliaria en China
¿Hay crisis financiera en China?

La economía de China registró un crecimiento económico que decepcionó al mercado en el tercer trimestre, con un avance anual de 4.9 por ciento. El crecimiento del país cae muy por debajo de la tendencia que venía marcando en los años previos al Covid-19.
La crisis de Evergrande, la variante Delta y la crisis energética están haciendo efecto en el crecimiento económico de China. La economía ha pasado de crecer casi un 9% anual en el segundo trimestre del año a crecer menos de un 5% en el tercer trimestre de este 2021. Los mercados globales miran con preocupación lo que está ocurriendo en China.
El gigante asiático ha dado comienzo a un cambio de modelo económico que busca la sostenibilidad en el largo plazo, pero que tendrá un coste visible (en términos de crecimiento) en el corto, como se está pudiendo comprobar.
Lidiando con una crisis energética sin precedentes cuyo origen está en la reducción de emisiones para reducir la contaminación, pero que también se ha visto agravada por el auge del precio del carbón y el gas a nivel global. Varias provincias del país están racionando el consumo energético, afectando a la producción de varias industrias y, por ende, la actividad económica en su conjunto.

A su vez, China se encuentra viviendo una crisis inmobiliaria debido a diversas reformas al sector dentro del país. Una de ellas es que hay límites para los adeudos que pueden tener estas compañías. Beijing está poniendo las bases que darán lugar a un nuevo modelo económico menos dependiente de la deuda y del ladrillo. Esto ha llevado a al menos 4 compañías inmobiliarias, entre ellas Evergrande a rozar la quiebra.
En cuanto a los datos de actividad de septiembre, la producción industrial avanzó un 3,1% anual, frente al 5,3% del mes anterior, reflejando el daño por la escasez de energía. La inversión en activos fijos se desaceleró significativamente hasta el 7,3% inter-anual en los primeros tres trimestres de este año, frente a una lectura anterior del 8,9%.
Para el conjunto del año, se cree que el PIB chino crecerá un 8% (cuatro décimas menos que lo que calculaba anteriormente) y en 2022 la estimación se recorta otras cuatro décimas, al 5,4%.
Las autoridades han implementado algunas medidas para garantizar el suministro de carbón y electricidad, pero se prevé que la escasez de energía afectará la producción industrial durante uno o dos meses más.

